viernes, 20 de diciembre de 2013

Socialistas, se acabaron los lamentos



Estar en la oposición nos ha valido para ser autocríticos, saber lo que nunca debimos hacer y rearmar nuestra arquitectura para edificar el nuevo socialismo a la espera del líder que elegiremos entre tod@s y que nos llevará hacia el gobierno de España.

Estar en la oposición nos ha servido para recuperar la calle,vivir como se piensa, hacer lo que se dice. Ya hemos pasado por el escarnio público e interno y es hora de decir basta. Es hora de dar un paso al frente y de acabar con la derecha más reaccionaria de cuantas nos podíamos imaginar en este contexto socio-económico.
Teniendo la certeza de que será el PSOE o no será nadie, el que lidere la nueva transformación social hacia la España del conocimiento y los derechos sociales, hemos decidido dejar los lamentos para otros, apostar por la confianza, por la esperanza que nos contagia el futuro que construiremos y marchar junto a los trabajadores, los funcionarios, los estudiantes, las mujeres y los mayores de este país, hacia el comienzo de un nuevo tiempo.
Si el PP nos ha hecho retroceder cuarenta años en materia de derechos y servicios, el PSOE nos hará avanzar desde la recuperación de lo perdido. La creación de nuevas relaciones laborales, derogando la reforma laboral impuesta por el PP, la Educación Pública como derecho inalienable, derogando la ley Wert y buscando el necesario consenso roto en la política educativa, la Sanidad publica, recuperándola del expolio a la que la han sometido los amigos de la derecha y sus ansias de negocio a costa de todo y de todos, serán algunos de los ejes fundamentales en la acción del Gobierno socialista.

El PSOE no gasta en la gente, invierte en futuro. Para nosotros, la cohesión se basa en el desarrollo social y en el final de los límites. Se acabó la España del Concordato y saldrá la España laica y equitativa que hará de lo público el crisol donde potenciar nuestras virtudes.

Todo lo que tenemos por delante, como socialistas y gestores responsables del bienestar humano, se compone como un reto envidiable. Estamos aquí y ahora, en un momento histórico en el que juntos, decididos y sin mezquindades, haremos de España el país que hoy soñamos, un país real, donde la cuna en la que naces no condicione dónde puedas llegar, un país en el que la libertad pública no esté condicionada por la seguridad privada, un país donde la ciudadanía sea más importante que las banderas, un país donde la educación sea el arma contra la represión, un país donde la Justicia sea igual para todosun país de la gente y no de los territorios, un país con la suficiente memoria para conseguir un futuro mejor que el pasado vivido.

viernes, 13 de diciembre de 2013

Europeas, cita decisiva para frenar a la derecha excluyente



Desde que el PP gobierna España y Extremadura, los datos de desempleo y la exclusión han sido los lamentables protagonistas del día a día de su gestión. La derecha se ensañó especialmente con la Sanidad y la Educación públicas, dos de los pilares esenciales de nuestro modelo de crecimiento y esto ha hecho agrietar las bases de lo que construimos durante tres décadas.

La política económica que impera en Europa y se sigue a pies juntillas en España y Extremadura, empuja a la ciudadanía hacia niveles de pobreza desconocidos desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Leer y escuchar a Rajoy y Monago decir que “éste es el camino”, mientras aumenta la indigencia en las calles, es obsceno. No cabe duda que para el PP, el libre mercado y la crisis, son una oportunidad histórica para que el Estado Social dé paso a una americanización de las relaciones sociales.

El PSOE, una vez concluido el marco de lo que debe ser su futuro inmediato, está ante un año, el 2014, cargado de oportunidades para liderar el cambio y recuperar los valores de la revolución francesa a través de medidas de gobierno cuyo primer paso serán las elecciones europeas.

Es lógico y comprensible que la gente esté escéptica y remisa ante los próximos comicios europeos por la política económica impuesta por Merkel y por el capitalismo extremo que impera en estos tiempos, pero para acabar con esta política, que está llevando a la pobreza a la mayoría de la ciudadanía, para detener a los extremismos, al racismo y a los vientos de “amaneceres dorados” que pueden asolar la geografía europea, el único camino posible, el mejor y el más eficaz, es hacer más Europa social, no puede haber ninguna duda de que otra Europa es posible porque ya la hubo, la que construyó el Estado de Bienestar.

En las elecciones europeas del próximo año, podremos dar un claro mensaje de rechazo a la derecha y su filosofía vital de supervivencia del más fuerte económicamente. Con voluntad y convicción, deberemos ir a votar contra la Troika, contra del salvajismo mercantil con el que millones de españoles han terminado sin empleo ni esperanza. Va a ser nuestra oportunidad de votar por el cambio, de votar por la ciudadanía, de votar contra "los señores del mercado", de votar contra los especuladores, los usureros, contra los discípulos aventajados de estas políticas que nos llevan a la ruina económica, ética y ciudadana.

Desde el  PSOE tenemos que saberlo explicar sin filtros, desde la calle y entre la ciudadanía de la que somos parte, porque hay miles de razones para hacer de Europa, también, un freno al nuevo capitalismo encarnado por aquellos que proclaman trabajar más, pero con menos sueldo, menos derechos, menos protección social y ahí siempre nos tendrán enfrente, en Europa, en España y en Extremadura.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Con Monago y el PP, Extremadura aumenta su deuda



Los socialistas hemos venido dando soluciones para Extremadura y sus provincias durante tres décadas. Quien recuerde cómo éramos y cómo fuimos hasta hace un par de años, no puede sino cautivarse en la transformación que experimentamos gracias a políticas de progreso, inclusión y modernización. De un ordenador por alumno hemos pasado, con Monago, a la ausencia de transportes escolares.

Para los libretistas de la derecha liberal todo es cuestión de cuentas. Para los socialistas no, la ideología política diferencia la gestión, con 600 mil euros se puede mejorar la Educación o comprar alfombras rojas y luminaria para los premios Ceres. Son dos opciones: una social y otra excluyente. Nosotros y ellos, PSOE y PP, un abismo nos separa.

Desde 2011 a 2014 los gobiernos autoritarios y frívolos de Rajoy y de Monago, han hecho caer las inversiones en Extremadura 530 millones de euros. Eso sí, con la hipocresía que le caracteriza, Monago se inventa titulares, previo pago de los espacios, en los que intenta desmarcarse de Rajoy, pero en realidad calla y otorga a costa de los extremeños.

Como si no fuese suficiente, con el PP gobernando hemos perdido 1.085 millones de euros entre la caída de la inversiones y de las transferencias corrientes del Estado. Aquí tenemos la deuda contemporánea que habría que sumar a la histórica.

La caída de las inversiones y la ausencia de políticas sociales, componen el cóctel explosivo que desemboca en que tengamos en la actualidad el mayor número de parados de la historia, en la región, con especial impericia en la provincia de Cáceres, donde las políticas de desarrollo brillan por su ausencia.
Todo este expolio económico y las incapacidades del PP redundan en un presente desolador, con la reforma local amenazando y señalando un horizonte gris al que no podemos resignarnos, es tiempo para empezar a cambiar un gobierno reaccionario por otro de marcado carácter social.

Vivimos tiempos de confrontación ideológica porque el PP quiere que volvamos a ser un coto de caza con la población hacinada en periferias urbanas. Deambular por las ciudades como mano de obra barata y desesperada, es el caldo de cultivo para los grandes negocios que la derecha espera hacer con la sanidad, la educación y los servicios.

Debemos reivindicar lo que nos deben y no permitir que un producto comercial como Monago se pavonee por España para vender una realidad que no existe, mientras la renta básica no se cobra, mientras los proveedores languidecen, mientras explotan a nuestros mayores y mientras expulsan a nuestros jóvenes.

Reivindicar, pelear, unir, edificar son algunos de los verbos que vamos a seguir conjugando para recuperar a Extremadura del expolio y el olvido.